Mi padre acaba de escribirme esto:

"Te podría decir que me hace falta

la infinita bondad que te ennoblece.

Te podría añadir que bien quisiera

despertarte cada mañana con un beso

y decirte “¡despierta, mariposa, vuela y vuela!”

y rodearte de abrazos, cálidos y fuertes.

Si debo decirte que

quiero verte doctorada,

con tu vida resuelta y tu trabajo.

Que te haga sentir feliz en su vivencia,

que te haga vivir de la vida siempre enamorada.

Y mis prisas, y por ellas me disculpo,

no obedecen a pretensiones de padre presumido.

De veras que no, y ya lo sabes.

Es… sólo… que el tiempo es mi enemigo.

Y bien quisiera asistir a tu grado,

y besarte delante de todos y que sepan

que siempre, siempre y siempre…

te quiero y te he querido.

Te podría decir, y ya lo sabes, que me siento de ti muy orgulloso,

como siempre me he sentido."

Papá, sabes que te quiero!!!!!!!

En 15 minutos paso a verte!!!!