Una isla siempre es sola.
Vivo en una isla
rodeada de aceras vacías.
De recuerdos rotos.
De futuro incierto.
Muda, converso en silencio.
Y mis palabras huyen con el viento
libre.
Las horas no existen, no importan.
No hay un sentido.
Sólo tiempo autómata
repitiéndose.
Letanía lúgubre.
Ausencia de mí.
Temas:
escritos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario