Son días recordando aventuras y desventuras junto a aquellos que las vivieron a mi lado.son mañanas, tardes y noches conociendo a quienes a partir de ahora las viviran.
son tiempos de nostalgia, tiempos de apetura y a la vez de redescubrimiento.
son otros tiempos, no son los que eran...
son tiempos, otros tiempos sin tiempo, o con demasiado.
y en ese tiempo yo que hago?
a la Esperanza me agarro.
creo en Ella, que me parta un rayo!!
otros, nuevos y ojalá más llenos...
tiempos llenos de vida!
tiempos de infancia perdida,
de intenciones puras
y amor sin medida...
mientras,
siguen guerras tardías.
y la naturaleza ya,
podrida...
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Hola Pat,
ResponderEliminarEl tiempo no cambia. Somos nosotros los que cambianmos -o a los que nos cambia algo o alguien sin que nos demos cuenta-. Entonces parece que el tiempo discurre más despacio, por caminos extraños que no son los que caminábamos ayer.
Pero siempre podemos volver a nuestra senda. A veces cuesta más, hay piedras enormes en el camino, otras se hace más sencillo. Lo que no hay que hacer es conformarse y quedarse esperando a que llegue el tren. Es mejor cogerlo en marcha o empezar a andar con los pies descalzos y seguir sembrando semillas día a día.
Sí, me gustó tu blog. Ya añado un link desde el mío, como te dije ayer en el Diapasón. Repecto a lo del Fancine... si me animo, escribo algo. Me gusta escribir. Algunas ficciones (historias) las he puesto en mi blog. Nada del otro mundo. Escribo porque me gusta, sea bueno o malo el producto.
De momento mi cabezá sigue en medio de la selva amazónica y me cuesta pensar acá de regreso al mundo occidental.
Creo que incluso mi nivel de frikismo disminuido, porque ultimamente ecuentro a Mario y a Lugi demasiado pasados... en fin, será cuestión de volver a aterrizar....
Saludos,
Álvaro
http://alvarohist.blogspot.com